6 a 3 y 6 a 0
CPC Sergio Luna Montero
Innovarum: Capacitación Empresarial
En mi ciudad se esta desarrollando un torneo internacional de tenis de mujeres. Como buen aficionado a los deportes voy a ver los partidos. Pongo mucha atención en los partidos que juegan nuestras compatriotas con las de otros países. Vi un partido que me llamo mucho la atención, un partido que jugo una peruana con una suiza. Esta es la crónica de este partido.
Llegan a la cancha, comienzan a calentar. Lo que me sorprendió acá, fue nada más y nada menos, de la seriedad de la suiza, yo la miraba y parecía una máquina. No se reía y no se imputaba por nada. Nuestra compatriota, llego con sus audífonos escuchando música y en la cancha se encontró con sus amigos y amigas, se puso a conversar largo y tendido. Era una ambiente totalmente distendido para ella.
Se hace el sortero de saque o cancha, la suiza pide saque. Nuestra compatriota gana el game y la blanquea en el mismo (la quiebra el servicio). Llega un momento en que se llega aponer 3 a 0, a favor a nuestra compatriota. Hasta allí, para ella todo era risa y felicidad. Su rival, no se inmutaba para nada y por nada.
Comienza a sacar la suiza y comienza a remontar de una manera notable, se llega a poner 3 a 3 y luego gana el set 6 a 3, con mucha facilidad. Nuestra compatriota se quedo perpleja y estupefacta. El segundo set, termina 6 a 0 otra vez a favor de la suiza, en una palabra: “La blanqueo”. Durante el primer y segundo, esta era la actitud de nuestra compatriota:
- A hablar con ella misma.
- Reclamar “de todo y contra todo”.
- Hablaba constantemente con su coach.
- Si no llegaba a alguna bola, decía que la cancha estaba en malas condiciones.
- Reclamaba cada punto y lo hacia bajar al juez de silla para ver las bolas divididas.
- Llego un momento en que con su raqueta golpeaba los paneles de publicidad (el juez de silla le llamo la atención).
- El momento cumbre, fue cuando rompió su raqueta de “pura rabia y de ira”.
La suiza, no parecía estar en “cuerpo y mente en campo”, no se inmutaba para nada. Para no perder la concentración miraba constantemente su raqueta. Que frialdad para jugar y que manera de ver las cosas tan simples. Una sola vez hizo bajar al juez de silla, para ver una bola que no considero como buena. El arbitro, la considero como mala. Ella no se hizo problemas y continúo jugando, como si “no pasara nada de nada”.
Si hay una diferencia entre nuestros deportistas con los de otros países, no es nada más y nada menos que “fortaleza mental”. “Los de afuera” se enfocan en jugar: ”Punto a punto”, ganar el partido, y lograr el campeonato. Paso a paso, se logran grandes cosas en la vida (una vez me dijeron).
Esta es la crónica de un simple aficionado al tenis, que no es psicólogo y que no pretende lapidar a nuestros compatriotas deportistas.
Fuente : http://normacontable.org
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